Salud

Acceso a la asistencia sanitaria

Los ciudadanos de la UE que enferman repentinamente o sufren un accidente durante una estancia temporal en cualquier país de la Unión Europea, Islandia, Liechtenstein, Noruega o Suiza, pueden recibir la misma asistencia sanitaria pública que las personas aseguradas en el país visitado, en iguales condiciones y al mismo coste. Cada país tiene sus propias normas sobre sanidad pública. En algunos países es gratuita, mientras que en otros hay que pagar parte de los costes o bien pagarlos por completo y solicitar luego un reembolso. Guarde, por tanto, todas las facturas, recetas y recibos. Solicite el reembolso en el país que visita o, en su defecto, en su país de origen.

La tarjeta sanitaria europea demuestra que usted está asegurado en un país de la UE. Simplifica los trámites y permite acelerar el reembolso de los costes. Puede obtenerla de forma gratuita en el seguro de enfermedad de su país. Algunos países incorporan la tarjeta europea en el reverso de su propia tarjeta sanitaria, mientras que otros expiden tarjetas separadas.

Seguro de viaje

La tarjeta sanitaria europea no sustituye al seguro de viaje, ni cubre todos los costes sanitarios. Nunca se hace cargo de la repatriación, por lo que es conveniente un seguro de viaje que cubra esos costes.Medicamentos Si viaja con medicamentos que requieran receta médica, llévela consigo. Limítese a la cantidad que vaya a necesitar durante el viaje, pues grandes cantidades de medicamentos pueden despertar sospechas. Las nuevas normas europeas sobre recetas transfronterizas le facilitarán la obtención de medicamentos con receta en el extranjero.

Vacunas

Aunque no hay requisitos generales de vacunación para viajar por la UE, sí existen algunos requisitos o recomendaciones para determinados territorios de ultramar. Consulte a su médico antes de emprender el viaje.

Aguas de baño

En la UE se aplican normas estrictas para las aguas de baño y la calidad general del agua es elevada. Más del 94 % de las 22 000 zonas de baño de las costas, ríos y lagos de la UE respetan las normas mínimas de calidad. En estos lugares se informa de la calidad del agua con símbolos oficiales. Además, hay sistemas voluntarios, como la bandera azul, que indican que una playa o un puerto deportivo cumplen normas específicas sobre la calidad del agua y sobre seguridad, servicios, gestión medioambiental e información.